Son muchos los motivos por los que nuestros dientes pueden coger ese tono amarillento tan poco favorecedor, desde el tabaco, el consumo de café, una mala limpieza bucal, las frutas de color oscuro, las salsas, las bebidas con gas….
Una solución rápida y eficaz, sería acudir al dentista para realizar un blanqueamiento dental pero para que engañar a nadie, serán muy eficaces pero no está al alcance de todos los bolsillos. Por eso hoy os quiero dejar unos remedios caseros, que no estropean en absoluto nuestro esmalte y que ayudan a blanquear los dientes. Espero que os sea de mucha ayuda.
1. El producto más utilizado y conocido es el bicarbonato de sodio, pero yo no suelo recomendarlo mucho porque hay mucha gente que lo coge por costumbre y es un producto del que no se debe abusar. En caso de que lo queráis usar, hay un montón de maneras pero la más rápida y sencilla es aplicar un poco del bicarbonato directamente en el cepillo de dientes cuando ya tenemos la pasta puesta. Pero nunca debemos hacerlo por más de dos semanas.
Aquí os explico otras formas de usarlo como blanqueador dental.
http://www.secretodamiga.com/2015/04/blanquear-tus-dientes-con.html
2. Cáscara de naranja
Esta fruta tiene un alto contenido en calcio y vitamina C, por lo tanto, podemos utilizarla en nuestros dientes sin ningún tipo de riesgo.
Cada noche después de lavar los dientes, hay que frotar en los dientes la cáscara de la naranja. Ya veréis como en 10-15 días comenzáis a notar los resultados.
3. Limón
El limón ayuda a eliminar el color amarillento gracias a sus propiedades blanqueadoras.
Se puede hacer de dos maneras, la más sencilla es frotando en los dientes la cáscara y la segunda es poniendo en el cepillo de dientes unas gotitas de limón y un poquito de sal. Con esta mezcla hay que frotar los dientes como si se tratase de la pasta. Se deja actuar unos minutos y después enjuagar la boca bien con agua.
Si lo hacéis cada día por la mañana y por la noche, ya veréis como en 10-15 días empezáis a notar los resultados.
4. Fresas
Frotar diariamente una fresa partida por la mitad en los dientes, no sólo ayuda a deshacerse del color amarillo. También previene la inflamación en las encías y fortalece las encías sangrantes.
Hay quien utiliza la sal diariamente añadiéndola en el cepillo junto a la pasta dental, yo os aconsejo que durante unos días lo mezcléis con el limón para conseguir blanquear los dientes pero nunca utilizarla sola y durante periodos largos, ya que puede dañar el esmalte.
5. Manzana
El ácido de la manzana también se convierte en un aliado estupendo para nuestras encías. En esta ocasión, bastará con añadir una pieza de esta fruta a nuestra dieta diaria.
6. Cerveza
Tenemos que preparar la mezcla de una cucharada de levadura de cerveza, con un poco de agua y dos cucharaditas de sal. Lo mezclamos bien hasta tener una pasta homogénea y hay que cepillarse los dientes con esta mezcla.
Importante:
Ninguno de estos remedios caseros sustituye la limpieza diaria de los dientes. Todo es complementario a la limpieza dental y nunca cogerlo como una costumbre.
Para evitar que los dientes se pongan amarillos, debemos:
– Tomar el café menos caliente.
– Reducir el consumo de azúcar.
– Cepillarnos los dientes tres veces al día sin olvidar la lengua.
– Enjuagar bien la boca.
– Utilizar hilo dental.
– Evitar el tabaco.
Para mantener los dientes blancos, debemos consumir productos que cuidan nuestro esmalte. Entre ellos:
– Lácteos.
– Y verduras con mucha fibra como los pimientos, remolachas. berenjenas, zanahorias, espárragos, espinacas, lechugas, etc…
