Los jugos se han convertido en la bebida favorita para muchas mujeres y también muchísimos hombres ya que nos ayudan a cuidar la línea. Ya sabéis que yo soy partidaria de las comidas, bebidas y snacks sanos y los jugos forman parte de ese conjunto de alimentos que nos ayudan a sentirnos mucho mejor por dentro y por fuera.
Una bebida que se consume muchísimo durante todo el año pero es en verano cuando coge aún más protagonismo ya que hay un millón de variedades.
Nos ayudan a eliminar toxinas, reducen la retención de líquidos y nos ayudan a quemar grasas de forma sana.
Las chicas que seguís mis menús semanales, ya sabéis que incluyo en algunas semanas smoothies detox y hoy os quiero dejar algunas recetas nuevas para preparar jugos de piña y apio.
¿Por qué piña y apio?, ahora os explico todo lo que nos aportan…
El apio es rico en atioxidantes, vitaminas y minerales, nos ayuda a hacer la digestión y a eliminar toxinas, nos ayuda a regular el tránsito intestinal, es depurativo, diurético, nos ayuda a eliminar líquidos,…
La piña nos ayuda a hacer mejor la digestión, nos aporta mucha agua y fibra, es saciante, diurética, depurativa, ayuda a reducir el colesterol malo y reduce la hinchazón.
Jugo de apio, piña y pepino
Necesitaremos 1 tallo grande de apio, 1/2 pepino (sin pelar) y 2 rodajas de piña.
Preparación: lavamos y partimos los ingredientes y los metemos en la licuadora. Podéis añadir un poco de agua.
Jugo de piña, perejil y apio
Necesitaremos: 1 rodaja de piña, 1 tallo de apio, 2 ramas de perejil y 1/2 vaso de agua.
Preparación: Tenemos que lavar y trocear bien los ingredientes. Los añadiremos a la licuadora y después añadiremos el agua.
Y si os apetece un batido, aquí tenéis como preparar uno de apio, piña y kiwi
Necesitaremos: 2 kiwis, 2 rodajas de piña, 1 vaso de leche (desnatada) y 1 rama de apio.
Preparación: Tenemos que lavar y cortar el apio. La piña y los kiwis los tenemos que pelar y trocear. Y simplemente, tenemos que meter en la licuadora todos los ingredientes incluyendo la leche desnatada. Hay que pasarlo por la licuadora hasta conseguir la textura de un batido.
Seguro que habéis visto en muchos supermercados y grandes comercios estos zumos preparados, listos para comprar y consumir. Pero siempre es mucho mejor preparar nuestros propios jugos en casa ya que así nos aseguramos de los ingredientes que introducimos y al mismo tiempo los podemos preparar y consumir rápidamente para asegurarnos de que no pierde ninguna de sus propiedades. Aunque los que venden, siempre son una buena alternativa cuando no tenemos tiempo.
