Como soy madre y trabajadora, estoy agotada después de un largo e intenso día, así que como me lo merezco he decidido mimarme un poquito. ¿Os apetece mimaros un poquito?.
Aunque nos parezca hasta raro, porque a veces no tenemos tiempo de nada y mucho menos de pegarte una hora en la bañera tumbada, eso no quita que me apetezca mucho y en muchas ocasiones, sobre todo cuando hemos tenido días muy estresantes…..así que comenzamos.
Debemos comenzar siempre por cuidarnos por dentro, puedes optar por la infusiones como la cola de caballo, tomillo, romero o diente de león.
Las infusiones nos ayudan a depurar el organismo y si las tomas después de las comidas te ayudarán a hacer la digestión y a deshacer los gases.
Si las infusiones no te gustan (puedes probar por tomarlas en frío), puedes tomar jugos de verduras y frutas.
Os he ido colgando algunas recetas de detox en el blog y la página.
Si necesitas relajarte te puedes hacer un masaje facial con aceites o con alguna crema.
Cuando hayas terminado el masaje debes refrescarte la cara, una opción muy buena es el agua de rosas.
Aprovecha la hora del baño,
enciende alguna velita
preferiblemente aromática.
Añade al agua alguna sal aromática, ayuda a liberar tensiones.
Si te sientes muy cansada y sientes peso en los ojos, te puedes poner discos de algodón empapados en té verde.
Si no tienes sales te las puedes hacer, solo necesitas sal gruesa, colorante alimenticio, bolsas de té y aceites esenciales.
Lo mezclas todo y lo dejas secar unas horas en alguna bandejita.
Cuando salgas del baño, tendrás los poros abiertos, te debes aplicar alguna crema hidratante.
Y para terminar de sentirme bien: ¡Yo me pongo perfume hasta para dormir!.
¿Cómo te sientes ahora?
