Justamente “milagro” es como llaman a este producto en casa por eso hoy os quiero contar mi experiencia después de llevar probando el nuevo Hércules de Cristasol durante varias semanas.
Ya sabéis que a mí me encanta participar en campañas cuando se trata de conocer productos estupendos ya sean cosméticos, productos del cabello, alimentación, bebidas sanas o incluso productos de limpieza ya que estos nos pueden llegar a ahorrar muchísimo tiempo y esfuerzo algo que una mujer como yo valora muchísimo.
Como os acabo de comentar hace unas semanas recibía en casa un kit completo del mejor quitagrasas que he probado en mi vida.
Tenía mucha curiosidad por probarlo ya que muchas veces nos prometen mucho más de lo que luego recibimos y la decepción resulta enorme. Así que me puse en marcha y comencé a probarlo desde el día siguiente de recibirlo.
Me resultaba un poco increíble cuando leí que se trataba de pulverizar, esperar unos segundos y aclarar pasando por ejemplo una bayeta…algo que sinceramente me parecía super complicado pero mi sorpresa llegó cuando lo comprobé con mis propios ojos.
Lo hemos probado en el horno (después de preparar lasaña y de que el horno terminara como si la bechamel hubiese estallado), en la vitrocerámica, en los azulejos de la cocina y el baño, hemos limpiado el parking, en las llantas de mi coche y ha dejado la barbacoa más limpia que el día que la compramos.
Y aunque en las fotos podéis apreciar que me llegaron muchos botes, únicamente nos quedamos unos ya que se trataba de conocer y dar a conocer el producto y así lo hice ya que repartí todos los botes entre familia y amigos. Y después me fui al super a comprar un bote porque el mío se había terminado 🙁
Mis amigos y familiares han podido probar la eficacia del mejor quitagrasas que he probado nunca, Hércules de Cristasol, ¡incluso me han pedido más vales descuento! porque con mi kit recibía 20 vales descuentos para repartir y poder beneficiarnos de 1 euro de descuento en la próxima compra.
Si aún no lo habéis probado os recomiendo hacerlo ya que su precio es mínimo a cambio de todo lo que nos ofrece y la faena que nos quita.
Podéis comprarlo por 2,19 euros aproximadamente y el recambio cuesta 1,89 euros.
